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quiero.

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Quiero que me mire como a ese algo que sabes que puedes tener con solo servirlo en un vaso. Con solo susurrar unas palabras o decir un por favor es suficiente. No necesitas ni tocarme. Es difícil no ser blando ante ti. Es difícil no besar el fondo del abismo cuando veo tus ojos mirándome, mirándome, mirándome ciegamente. He compartido el pan. Te he encargado mi cuerpo como un chocolate de ciento treinta gramos. De esos, si. De eso que te gusta comer a la madrugada cuando estás tan ocupada pensando en otros que no soy yo y que a veces se cruzan con algo mío. Se que no soy único ni saco lo mejor de mi contigo. Se tantas cosas y se que vos me puedes mostrar otras tantas. Capaz es eso. Si siempre es eso. Saber mas. Aprender a punta de puntas de grafito clavadas en el hombro. Escritas o no las palabras que te deseo son más acción que anhelo. Ve este cielo ¿No es bonito pensar que a los dos nos aprecian las mismas miradas?  ¿Nos es bonito pensar? Darle suelta rienda, rienda suelta a la i...

Cuando se pone azul.

      Cuando un dia soleado se pone azul.     No hay nubes que se interpongan en el camino, en el cielo solo resplandece algo lejano, ajeno que nos da vida a nosotros y a nuestro ambiente. Estar encerrado. Evitando ese calor vital es un acto de cobardía. Es el simple hecho de no querer vivir apropiadamente. En este momento a través de mi parte consiente conozco y hago las preguntas que deben hacerse aquellos que llegan a una crisis. Yo no estoy en crisis, estoy en disyuntivas. Veo señalizaciones de adonde ir, adonde dirigir mi aliento. Lo mejor de todo, que a su vez es lo peor, es que conozco las respuestas. Tengo miedo cómo cualquiera que se me parezca. En tiempo y forma. En física y mental. Tengo un miedo terrible, Deseo con todas mis fuerzas. Deseo quitarme la arrogancia que consigo trae el temblor. El miedo también trae consigo una parte de parálisis. Tenemos en nuestra mente un ciervo, un delfín, una hiena, un burro, una t...

Dos minutos del otoño cordobés.

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       La vida es mucho mejor. Se ha vivido al menos estos dos últimos minutos mas intensamente. Harán ya unos... ¿tres meses? no podría afirmarlo con exactitud pero ese será un tiempo aproximado, ya no llevo cuenta del numero si no de que hay adentro de cada día. Básicamente es mi actitud signature ; no me importa; esta vez de verdad, ni un poquito. He visto claramente los colores vivos, los arboles acariciando el viento y atravesando por el medio los mareos, el trafico y los vicios.       Se que puedo. Ahora tengo tiempo.      Tiempo que, en realidad, ( que mas real que el tiempo) siempre anduvo disponible solo que ahora estoy dispuesto a exprimirle el jugo y tomármelo como necesariamente debo tomarlo: con paciencia. Ya no llevo la cuenta. No importa y no interesa, al principio es una herramienta útil para ver pero solo un tonto se quedaría a llevar cada dato al digito y dejarlo ahí. Tengo una autoestima difusa...

Guerra Abierta

 Muerte acelerada. La hoja cae lentamente, desprendiéndose de las demás. Alejándose. Acercándose al suelo donde sus primas reposan.      Aire polvoriento y reciclado. No corre el viento pues no hay ventanas. Un campo que habita matorrales y espigas crece cada año, cada vez mas alto, voluminoso. Un lugar perfecto para esconder lo que se desee. Un cuerpo, un amante, una mentira e incluso la verdad que a menudo son la misma cosa. Vienen del mismo cuerpo: la sombra, el contorno de la sombra.

Metro S.A

    Estaba sentado viendo todo el movimiento de gente que se desplaza a media tarde por el metro, ese caminar errático de la mayoría, la frente sudorosa de casi todos y rápido, rápido que se nos va el metro. Frente sudorosa, lengua chiclosa. Pasan vendiendo cualquier mierda, cualquier cosa que en principio parece inútil y que seguro alguna vez compraste unos caramelos, unos chicles, alguna rancia golosina. Dios no se atrevería, creo que ignoraba, esta construcción subterránea que atesta aun mas la ciudad. Un medio que en vez de solucionar complica. Así mismo como lo que no es un acertijo y te deja con la duda todo el mes. Como la mejor cárcel, una sin barrotes ni guardias, ni siquiera prohibiciones explicitas. Una que de verdad te expía las penas, te explora las vergüenzas. Ignora, claro que si. Es sucio, es horrible ver la suciedad de los railes y de las cabezas que se montan dos, tres veces al día en los vagones mirando...

Espectro Hotel (uno)

      Esto es una entrada al blog, nueva,  pero que lleva dando tumbos y volteretas en mi cabeza por horas.      Soy tantas cosas, cualidades, habilidades y personas al mismo tiempo. Soy aquello que primero te ve a la mañana, lo ultimo que te desnuda a la noche. Soy el acompañante sin cargo, sin presupuesto. Una amistad de primera mano, literalmente. Un amor a primera vista y el odio que no te deja dar un paso hacia adelante. El miedo. La tentación. La envoltura a la que no quieres desenvolver, atravesar, explorar. Soy el canal de los nervios, las ulceras, el mal estomacal. Albergo tu reflejo y lo deformo cuando no lo ves. Mientras respiras dormido por la boca secando las fauces. Soy un accidente y soy un plan.      Soy tu completo yo.      Suena extraño.     Tal vez no estes acostumbrado a verme asi. Tan expuesto. Despierto en tu propia piel hablándote de quien soy. Ya me conoces. Nunca he sido bueno con la...

Tonos para no creyentes.

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Es muy fácil mandar un mensaje ¿cierto? Es muy fácil hablar un par de horas entre cristales, ventanales de acero y líquidos oxigenados. De esto no se trata. No. No se trata de bebidas y las horas después del amanecer. No quiero escribir hoy de nada que me ha hecho algún mal. Quiero pizcas de ese naranja incandescente que ciega los pecados al atardecer, que suaviza cualquier duda existente entre vos y tu voz. Quiero que me deje pintado en la vereda, en la boca amarilla que traga la nunca posible inundación. Nada de esto es real. Eso es lo que quiero creer. Mientras deseo, rezo a algo que no me puede devolver la piel, el lienzo, la carne. Avergonzado mirando, anonadado, las copas de los árboles esperando que me busques en mi techo de hojas, en el suelo de algodón. Acomodando las lágrimas. Quiero que te sepa mejor el azul, es tu número, tu color. No se en que temporada me encuentro. Me arrodillo. Rezo. Desierto con focos que iluminan al sol. Una sartén caliente calcinando sazó...