Mejor. (Texto feliz III)

  Suena jazz en la habitación. Sea en Córdoba, Buenos Aires, Caracas, Madrid o Malasia, incluyendo Australia y Alaska. No canto, no cantas. Bailamos en la sala, sonriendo a ratos reposando la barbilla en el hombro. Un brazo sostiene la espalda alta y, el otro tímidamente toma la cadera. 

 ¿Cuanto hemos estado así? No lo se, pero la felicidad no se hace preguntas. Bajemos a la alegría, es solo un escalón.  Suena Parker, Coltrane y Baker. Todos parecidos pero cada uno se destaca en un área especifica. Como la medicina. Todos tienen base pero su especialidad, con el tiempo, es elegida o ( como es usual el jazz) es descubierta por oídos refinados, mas sensibles que los míos a las peculiaridades de estos exponentes.  

 Suena jazz en la habitación. Sabemos que quien abre la puerta del jazz le será terrible, tortuoso y vergüenza cerrarla. Para mi, claro esta, desde que abrí el sótano del jazz y su compuertas teñidas de almas azules no volví, al menos no volví esperando volver, como es la única manera de regresar. 

 Se que esta todo mejor ahora. Estas canciones invitan a la imaginación a imaginar, a caminar por sus pasillos y no correr desesperadamente como mis piernas hacen por la tarde. 

 Escuchemos a Baker un poco mas. Suena jazz en la habitación, todo esta mejor.